martes, 13 de noviembre de 2012

Para que te quedes tranquilo...

Esta es una carta personal que en su día escribí a mi padre, mientras él dormía después de tanto dolor nocturno, y ahora quiero compartirla con vosotros.
...Aquella mañana estábamos juntos, coleccionando minutos de historias, de recuerdo, de futuras nostalgias...

Papito querido de mi alma, tú y yo siempre nos hemos contado todo... Tú me llamabas contándome las últimas novedades de la familia, y yo hacía lo mismo... Nos encanta ser el primero en contarle algo nuevo al otro...
Así que quiero ser la primera en contarte como será mi vida... no estarás para verlo, pero te prometo que intentaré ser lo más fiel posible a estas letras el resto de mi vida.

El futuro se planea, y así lo he hecho toda la vida, aunque a veces ese mismo futuro te hace jugarretas difíciles de imaginar...

Ten por seguro que acabaré mis estudios, haré mi grado universitario, sacaré las mejores notas, espero sean las mejores... Me apuntaré a cursillos para conseguir más créditos para en un futuro, después de la carrera, poder hacer un postgrado.
Tú sabes que siempre he querido trabajar en un hospital, ahora más que nunca quiero hacer un postgrado de "Enfermería Oncológica" ... Puede que sea muy duro, pero quiero hacerlo... Quiero que nuestra historia me ayude a ser mejor enfermera en el área de Oncología.
Y lo seré Papi, te lo prometo.
Y si Dios me lo concede. Quiero saber todo lo que se pueda sobre la enfermería, y no olvidar la humanidad al tratar a un paciente. Y recordaré a aquella enfermera del King's College Hospital de Londres, una de esas tantas noches que pasamos en urgencias; tú con los dolores del cáncer, y nosotras con el dolor en el alma al verte así...  No la olvidaré, porque te trató como a una persona que sufre, no como a un "paciente"... Hasta nos brindó té para hacer algo más llevadera la madrugada... No olvidaré que tú dijiste que "ojalá, todas las enfermeras fueran como ella"

Me da una pena indescriptible pensar que cuando me case, y vaya hacia el altar no podré ir de tu brazo... no puedo imaginarme caminando sin ti.
Estaba tan segura de que lograríamos llegar a ese momento cogidos de la mano, jamás dudé de poder hacerlo junto a ti... he pensado más en el hombre que me esperaba al final del pasillo, que en ti que me llevabas del brazo.
No sé cómo será él, pero ojalá pueda elegir correctamente a ese compañero de viaje... Y ojalá pueda ser feliz. Como siempre has querido, como todo padre quiere para su hija.

No fuiste abuelo, no pudiste gozar de tus nietos.... estoy segura de que habrías sido el mejor abuelo del mundo. Creo que habría un punto en el que te querrían más a ti que a sus propios padres... lo niños te adoraban, y tus nietos no serían la excepción.
Seguro que les contarías las historias que tantas veces me contaste de niña, y al igual que yo, ellos te creerían ciegamente. Tienes ese don de hacer que lo increíble, sea creíble. Siempre serás mi Big Fish.

El mundo allá afuera es cruel, y carece muchas veces de amor... sé que te da miedo lo que vaya a ser de nosotros en este mundo egoísta y malo, pero no te preocupes, tuve el mejor ejemplo de luchador. Tú y mamá habéis sido el mejor de los referentes para andar por este mundo. Sabré luchar todas las batallas que la vida me ponga.

Gracias por hacer, junto a mamá, que este mundo gris a veces pareciera rosa... Y que otras veces hasta fuera color lavanda, porque sabías que es mi color favorito.

Te quiero.... Te querré.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

No sabía que tenías un blog, mira, ya tengo algo para cotillear ;) lo he encontrado de pura casualidad nosé ni como, me salió derrepente.
un besito.

Firma: Dokidoki ;)

Silvia A. A. Vasconcelos dijo...

Que bonita carta. Yo estoy segurâ que lograrâs cumplir tus metas, y sê tambiên que tu papâ estâ mâs que orgulloso de tener una hija como tu.

Besos

Riquero dijo...

MUCHAS GRACIAS SILVIA!! <3

DokiDoki, cotillea todo lo que quieras, soy un libro abierto... y además tu ya has leído varias páginas...