miércoles, 15 de octubre de 2008

Te deseo...

Hace dos días supe que éste blog era leído diariamente por una de las personas que más quiero ¡Que gran honor!... recordé que no había hablando aquí de ella... y deduje que más temprano que tarde ella me lo recordaría, y así fue. Ella es mi tía (mi Ñaña Reina), aunque a estas alturas seguramente ya se daba por aludida...
Este medio día bajaba las escaleras al zótano de La vita e bella, y allí estaba, rodeada de italianos, preparando lo que seguramente acabaría comiendo algún famoso deportista del Valencia C.F. o un famoso de la T.V. o simplemente alguien con hambre...
¿Qué poder decir de ella? ¿Qué decir cuando el cariño es indescriptible y solo se siente? He encontrado éste hermoso poema; dedicado a todos y en particular a ella... ¡Gracias!


Te deseo primero que ames,

y que amando, también seas amado.


Y que, de no ser así, seas breve en olvidar

y que después de olvidar, no guardes rencores.


Deseo, pues, que no sea así, pero que sí es,


sepas ser sin desesperar.


Te deseo también que tengas amigos,


y que, incluso malos e inconsecuentes


sean valientes y fieles, y que por lo menos


haya uno en quien confiar sin dudar


Y porque la vida es así,


te deseo también que tengas enemigos.


Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,


para que, algunas veces, te cuestiones


tus propias certezas. Y que entre ellos,


haya por lo menos uno que sea justo,


para que no te sientas demasiado seguro


Te deseo además que seas útil,


más no insustituible.


Y que en los momentos malos,


cuando no quede más nada,


esa utilidad sea suficiente


para mantenerte en pie.


Igualmente, te deseo que seas tolerante,


no con los que se equivocan poco,


porque eso es fácil, sino con los que


se equivocan mucho e irremediablemente,


y que haciendo buen uso de esa tolerancia,


sirvas de ejemplo a otros.


Te deseo que siendo joven no


madures demasiado de prisa,


y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,


y que siendo viejo no te dediques al desespero.


Porque cada edad tiene su placer


y su dolor y es necesario dejar


que fluyan entre nosotros.


Te deseo de paso que seas triste.


No todo el año, sino apenas un día.


Pero que en ese día descubras


que la risa diaria es buena, que la risa


habitual es sosa y la risa constante es malsana.


Te deseo que descubras,


con urgencia máxima, por encima


y a pesar de todo, que existen,


y que te rodean, seres oprimidos,


tratados con injusticia y personas infelices.


Te deseo que acaricies un perro,


alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero


erguir triunfante su canto matinal,


porque de esta manera,


sentirás bien por nada.


Deseo también que plantes una semilla,


por más minúscula que sea, y la


acompañes en su crecimiento,


para que descubras de cuantas vidas


está hecho un árbol.


Te deseo, además, que tengas dinero,


porque es necesario ser práctico,


Y que por lo menos una vez


por año pongas algo de ese dinero


frente a ti y digas: "Esto es mío".


sólo para que quede claro


quién es el dueño de quién.


Te deseo también que ninguno


de tus defectos muera, pero que si


muere alguno, puedas llorar


sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.


Te deseo por fin que, siendo hombre,


tengas una buena mujer, y que siendo


mujer, tengas un buen hombre,


mañana y al día siguiente, y que cuando


estén exhaustos y sonrientes,


hablen sobre amor para recomenzar.


Si todas estas cosas llegaran a pasar,


no tengo más nada que desearte.

(Poema de Victor Hugo)

1 comentario:

Anónimo dijo...

GRANDE....ERES UNA GENIO...I LOVE YOU....att: la que se sienta junto a ti el clases....jijiji