miércoles, 8 de octubre de 2008

Horror y gratitud...


Sin lugar a duda estas dos palabras explican los sentimientos que tuve al terminar de leer ayer el último libro que llegó a mis manos... El libro al que me refiero es: Un largo camino. Memorias de un niño soldado. Cuando lo vi quise comprármelo en ese mismo instante, pero tuve que esperar un mes para poder tenerlo y leerlo, mi mente no imaginaba todo lo que podría leer entre esas lineas escritas por: Ishmael Beah, él relata en primera persona el horror que vivió en Sierra Leona cuando en los años noventa llegó la guerra a su pueblo... cuenta como deambuló por el país en busca de libertad, felicidad e inocencia... en busca de todo lo que la guerra le había quitado.
Aunque el título es muy explícito, lo que relata dentro merece la pena leerse... es la primera vez que al leer un libro no solo lloro con los ojos, esta vez lloré con el alma.
¿Cuántas veces más el mundo mirará para el otro lado e ignorará al que sufre?
¿Cuántos niños serán transformados en mayores a sus doce años?
¿Qué nos pasa por la mente para llegar a tanto?

Me sentí horrorizada al tener que ver lo infelices que eran unos inocentes niños, su único pecado había sido el nacer allí... Durante todo el día tuve en el pecho la sensación de que aunque todos fuera 'normal' por este lado del mundo, no muy lejos de aqui sucedía esto.
Aunque no me quité de encima el horror, tuve tiempo para dar gracias a Dios por vivir y no tener que sobrevivir... algo tan normal como coger el bus, tomar agua o hablar con mi gente ahora lo hago con gratitud!

1 comentario:

Silvia A. A. Vasconcelos dijo...

Comprendo tu devastación por esa realidad.